Troya

Uno de los lugares más unidos a la mitología es sin duda Troya. Desde que Homero escribió la Iliada, la ciudad pasó a formar parte de lo más épico de nuestra cultura. Todos conocemos las historias de Aquiles, Ulises, Helena de Troya y el caballo con el que engañaron a los habitantes de la ciudad. En el extremo de la península de Anatolia, muy cerca de la entrada al Estrecho de los Dardanelos, podemos visitar las ruinas de aquella ciudad fundada hace 5000 años y que hoy atraen a miles de visitantes que acuden a pisar por los mismos lugares donde estuvieron los héroes.

Unas vacaciones diferentes, disfruta del mar en familia o con amigos, navegando. «My sea coach»

La costa turca es realmente impresionante, seguramente un auténtico paraíso para los amantes de la vela. Hoy en día uno de los mayores atractivos  para el turismo es la gran oferta de cruceros,alquiler de goletas o tours de un día en barco, que se ofrecen a lo largo de toda la costa del país.

Playa de «Bıyıklı» en Cunda

Turquía no sólo es un país lleno de yacimientos arqueológicos y restos de prácticamente todas las civilizaciones antiguas. Es también un país con una costa maravillosa. La costa sur mediterránea es una zona bastante turística y muy popular, sobre todo entre los turistas rusos, ingleses y alemanes. Pero aún hay muchas playas completamente desconocidas por los turistas, que son lugares paradisíacos en los que uno puede disfrutar de unas maravillosas vacaciones.

Una de estas playas es la playa de Bıyıklı, en Cunda.

Çandarlı, la ciudad de las mujeres.

Solo 90 Km separan a Izmir de esta pintoresca localidad en la costa norte del Egeo turco. Cuenta la leyenda que las guerreras amazonas fundaron varias ciudades en esa zona y la que levantaron en la pequeña península de la bahía de Aliaga fue bautizada como «la ciudad de las mujeres». Tras la conquista por Mehmet el Conquistador, la ciudad pasó a llamarse Çandarlı y sorprende que sea tan desconocida para el turismo internacional. Sus playas con vistas a la isla griega de Chios, el paseo marítimo lleno de terrazas, bares y restaurantes, unido a su monumental castillo genovés excelentemente conservado, tienen un espectacular atractivo y son un parada muy recomendable si vamos de excursión a Pérgamo. 

Puerto de Assos

El puerto de Assos se encuentra al norte de la bahía de Ayvalik y durante años, los artistas de Estambul conservaron  en secreto este refugio en una de las zonas más bonitas del Egeo turco. Desde luego, el puerto de Assos es uno de esos lugares a tener en cuenta si uno quiere perderse. Alejado del turismo internacional masivo, allí encontramos restaurantes y alojamientos a la misma orilla del mar. Las vistas de la Isla de Lesbos y de los pescadores regresando, se alternan con los yates y los lujosos coches de los pocos visitantes que puede albergar ese pequeño lugar.

Lonja de pescado en Urla, Izmir «Balık Pazarı»

Para los amantes del pescado o para los que quieran adentrarse un poco más en las tradiciones turcas, una visita indispensable en Izmir es  acudir a una lonja de pescado. Se celebran en prácticamente todos los pueblos costeros adiferentes horas de la mañana. Lo cierto es que es todo un espectáculo.

Puerto de Urla

Bodrum

Bodrum es el lugar donde se levantaba el Mausoleo de Halicarnaso, una de las siete maravillas del mundo y es la ciudad donde nació Heródoto, el padre de la Historia. Desde el centro de su bahía nos contempla el Castillo de San Pedro, construido por los Caballeros de San Juan en la época de las Cruzadas y que alberga el museo turco de Arqueología Submarina. Bodrum es una animada ciudad costera con una marina repleta de espectaculares embarcaciones. Un lugar de visita imprescindible en la costa turca del Egeo.

Gallipoli

En las playas y campos de la península de Gallipoli se libró en 1915 una terrible batalla que tuvo unas consecuencias insospechadas, tres naciones recuerdan aquellos días como el nacimiento de su identidad nacional. Australia, Nueva Zelanda y la propia Turquía ya no serían las mismas después de los combates por el control del Estrecho de los Dardanelos. Las autoridades turcas han querido rendir homenaje a los más de 100.000 hombres que perdieron la vida en Gallípoli y con ese objeto, la península, a pesar de la belleza de sus parajes, se ha mantenido al margen de la presión turística. Desde luego, esta es una visita que no defraudará a los que se decidan por ella.

Şeytan Sofrası, la mesa del diablo.

La costa de Turquía ofrece muchos lugares desde donde admirar paisajes únicos. Aunque ya se hayan visitado muchos de estos lugares, hay uno que vuelve a sorprender a los visitantes. Şeytan Sofrası está en una zona elevada sobre la bahía de Ayvalik. Apartada de los circuitos turísticos masivos, Ayvalik es conocida como el punto de salida de los ferries que salen hacia la cercana isla de Lesbos. Pero cuando uno llega allí se encuentra con un paisaje memorable, la bahía tiene 27 islas, está rodeada de montañas y la majestuosa silueta de Lesbos al oeste configura un escenario que encantará a cualquier visitante, en especial si se trata de un aficionado a la fotografía.

Foça. El canto de las sirenas.

Cuando Ulises regresaba de Troya pasó frente a las costas de Phokaia, el lugar donde habitaban las sirenas que con sus armoniosos cantos atraían a los barcos hacia las peligrosas rocas y una muerte segura. Afortunadamente, Ulises estaba advertido y se había hecho encadenar al mástil de su barco además de tapar con cera los oídos de sus hombres. Este conocido episodio de la Odisea sucedió a 70 Km de Izmir en la preciosa bahía de Foça. Actualmente, es una de las tres áreas de especial protección marina de Turquía, donde habita una de las escasas poblaciones de focas monje del Mediterráneo.